Una promesa de compraventa es un contrato que permite sellar las condiciones de una transacción inmobiliaria ofreciendo garantías a ambas partes.
En el cual se incluyen: Fechas de validez, cláusulas específicas, indemnizaciones, entre otros.
La promesa de compraventa antecede por unos meses a la firma de la escritura final en la notaría.
Esta presenta menos restricciones para el comprador potencial, que puede decidir si efectúa o no su opción de compra al final del período de validez.
En pocas palabras, este tipo de contrato obliga al propietario a reservar la vivienda para un comprador concreto. Pero este documento vinculante no está exento de garantías para el vendedor.
Teniendo en cuenta que la promesa de compraventa es un contrato preliminar que sella un acuerdo entre un propietario y un comprador, se firma para garantizar al comprador la adquisición de la propiedad y cerciorarse que el vendedor no lo ofrezca a un tercero.
En teoría, al este documento no es obligatorio, pero casi siempre se utiliza para sellar un acuerdo de venta.
¿La razón? La promesa de compraventa tiene una utilidad real: establece un plazo que permite a las dos partes validar varias condiciones previas a la venta.
Como la obtención de un préstamo, la ausencia de servidumbres y la depuración del derecho de tanteo.
Una vez firmada, la promesa de compraventa le da al comprador una opción de compra exclusiva.
Por tanto, como se mencionó anteriormente, el vendedor tiene prohibido ofrecer su propiedad a otra persona, es así que la venta debe reservarse para este comprador.
El documento de compraventa se produce al final de la negociación inmobiliaria, cuando se han acordado todos los detalles entre el vendedor y el comprador.
Este tipo de contrato escrito se firma en una notaría cuando se va a dar inicio a la negociación.
En este sentido, la promesa de compraventa anticipa el acto final de venta sellando las condiciones de la transacción inmobiliaria: precio, plazo, etc.
En el momento en que se firma una el documento y es incumplido por alguna de las partes, se presentan ciertas situaciones que dependerán de lo acordado y de las circunstancias del incumplimiento.
Se considera un incumplimiento de la promesa cuando una de las partes no cumple con lo que se estipula hacer dentro de la promesa ya firmada.
Por ejemplo, comprar o vender dentro de los plazos acordados.
Lo que se puede hacer cuando una de las partes incumple la algo que está escrito en este tipo del contrato es demandar el cumplimiento para así lograr llevar a cabo lo descrito en la promesa, o bien, se puede pedir la resolución de la misma.
Si se opta por la resolución de la promesa, se puede hacer de común acuerdo entre las partes o exigirlo judicialmente.
El objetivo es la necesidad de proceder a las restituciones mutuas a fin de que las cosas vuelvan a su estado previo sin consecuencias antes de firmar la promesa.
Esta clase de documentos son aspectos legales básicos que todo agente inmobiliario debe conocer, para cerrar el negocio sobre los diferentes tipos de inmuebles.
Sin embargo, no es lo único que debes tener presente.
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¿Qué se incluye en un contrato de compraventa?
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