La ubicación de un inmueble es uno de los factores más importantes para considerar cuando se busca vender una vivienda nueva o usada.
Es posible que promociones un inmueble que tenga todo el espacio y las comodidades que tu cliente potencial necesita, pero si está ubicado en un vecindario que no es deseable, es probable que tengas problemas para venderlo o rentarlo.
Ten presente que de una vivienda puedes cambiar prácticamente todo con el fin de venderla más rápido, es decir, puedes mejorar los acabados o el atractivo exterior, pero no puedes cambiar la ubicación.
Esta característica permanece estática y, por lo tanto, debe ser una prioridad al vender una casa. Estos son algunos de los factores que influyen que un inmueble tenga una buena o mala ubicación:
Una de las razones por las que la ubicación es tan importante en el sector inmobiliario es que los compradores a menudo quieren y necesitan un acceso cercano a las comodidades y opciones de transporte.
Esto significa una proximidad relativamente cercana a restaurantes, supermercados, tintorerías, tiendas y lugares de entretenimiento.
También podría significar una casa ubicada cerca de calles importantes y opciones de transporte público, como paradas de autobús y/o estaciones de metro.
Para bien o para mal, no puedes cambiar a sus vecinos (a menos que decidan irse por su propia voluntad). Si la vivienda que deseas vender o rentar tiene vecinos quienes no son agradables, podría afectar negativamente un cierre de venta.
Antes de vender una vivienda, conviene conocer bien el barrio. Da un paseo por las calle e intenta conocer a los vecinos si puedes. De esta manera, a la hora de vender la propiedad puedes hacer referencia a todo lo positivo que tenga el vecindario, incluyendo los vecinos.
¿La casa está dividida en zonas para escuelas de calidad? ¿Cómo está el distrito escolar local en general? Estas son preguntas a considerar al evaluar la ubicación de una casa y el valor de venta potencial.
Esto es especialmente cierto si la persona interesada en comprar vivienda busca opciones orientadas a la familia y si tienen hijos que deban ir a la escuela.
Sin embargo, recuerda que incluso si tu cliente potencial no tiene niños en edad escolar, la calidad de las escuelas sigue siendo una consideración importante. Ser propietario de una casa en un buen distrito escolar es una de las mejores formas de retener y aumentar el valor de una casa.
Sin lugar a duda, aunque la ubicación de la propiedad que estas vendiendo no tenga la mejor ubicación, puedes enfocarte en realzar las buenas características positivas y atractivas que tenga la vivienda.
Resaltando los factores que te mencionamos anteriormente (Opciones de transporte público, los vecinos, escuelas cercanas) e incluso destacar futuros proyectos como vías o plazas comerciales que se desarrollarán en el sector. Esto generará un valor agregado a la ubicación actual de un inmueble si no es el mejor.
Ten presente que la ubicación es clave cuando se trata del valor de una propiedad y el potencial de apreciación futura. ¿La razón? A menudo, la ubicación dicta la demanda en un mercado inmobiliario.
Si la casa está ubicada en un vecindario atractivo en un lugar donde las personas se mudan, entonces puede esperar que el valor de la casa resista la prueba del tiempo, e incluso se aprecie, a lo largo de los años. De esta forma, a medida que aumenta la demanda de una ubicación, la apreciación también seguirá aumentando.
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¿Qué es un inmueble y cuáles son sus características?